viernes, 30 de diciembre de 2011

BLANCA Y AGRIA DESNATADA NAVIDAD

No podía ser de otra manera; había que hablar de Navidad. Al menos, mencionarla. Cómo esquivarla si hasta la llevo en el nombre. Era objetivamente imposible.
Lo que pasa es que es ésta una Navidad insulsa; una navidad en minúsculas. Dicen que los centros comerciales estás llenos. Ayer, el centro de Murcia parecía que iba a reventar. Hay quien asegura que santa bendición la del consumo; sin él ya hubiéramos tocado fondo. Y yo me lo creo.
Y yo, que siempre soy la rara, ya tengo ganas de tocar fondo. Desde el 11 de mayo, cuando la Tierra (esa gran desconocida) rugió aquí al lado, vengo pensando que esto se va al carajo. Y nunca he leído a los mayas. Ojalá ya hubiéramos llegado al final de este suicidio colectivo que no parece concretarse nunca. A veces, el mundo me recuerda a Colón: creemos que hemos llegado a la meta sin saber que un infame y vasto océano nos separa de ella. Dónde está el paraíso del final.
En 2007, nos dijeron que 2008 sería peor; en 2008, que 2009. En 2009, nos comentaron cómo sería el fatídico 2010. Y, en 2010, por fin se equivocaron: 2011 ha sido mucho peor de lo esperado. Me gustaría dormir esta noche y despertarme en 2013, saltándome este 2012 de “crecimiento negativo”. Si hablásemos de un enfermo, el médico nos diría que hay que esperar al milagro. El milagro que, por cierto, fue prometido.
Tendremos un año para hablar de lo de siempre: amigo invisible, recesión, recortes, escándalo, monarquía, crash, aborto, intervención bancaria, hambre en África, violencia en el entorno familiar, matrimonio homosexual, peras y manzanas, Pantoja y Esteban, Eurocopa, Rafa Nadal, Premios Nobel, elecciones americanas y volver a empezar.
Lo peor de esta crisis y de esta navidad es que la recesión económica y social no vendrán acompañadas de la recuperación de esos valores de los que tanto se habla en las series americanas, tan discutidas por mí. Yo que soy de barrio he ido viendo como se perdía  la costumbre de pedir y dar ayuda al vecino. Como cada vez teníamos más, cada vez éramos más independientes. Cada vez nos cuesta más trabajo dar y, por ende, recibir. O viceversa. Saldremos de las Crisis (mayúscula) pero volveremos a caer en otra porque el Hombre (en mayúscula, que significa Ser Humano, varones y mujeres) es el único animal que tropieza dos millones de veces en la misma piedra.
Sólo hay una cosa que detesto más que el cordero y el vinagre: un vaso de leche desnatada caducada: blanca y agria.

viernes, 23 de diciembre de 2011

TEST DE RESISTENCIA A LA INTELIGENCIA

Con el fin de año conviene ponerse a prueba para ver si uno ha cumplido con los objetivos marcados doce meses atrás. Yo propongo poner a prueba nuestra capacidad de retentiva de cuanto absurdo somos capaz de soportar. Propongo para ello, la resolución mental de este sencillo test.

1.      ¿Cuántas veces es más fuerte que tú David el Gnomo?

2.      ¿De cuántos años murió?

3.      ¿Por qué Candy Candy se negó a ser adoptada?

4.      ¿De qué color era el coche de Pedro Bello en los “Autos Locos”?

5.      ¿Cuál era el nombre de la mascota de Pedro Picapiedra?

6.      ¿Cómo se llamaba el gato de Gargamel, el antagonista de los Pitufos?

7.      ¿Por qué motivo Screech Powers se enfada seriamente con Zack Morris como primera y única vez en “Salvados por la campana”?

8.      ¿De qué color tenían que ser las bragas de las chicas a criterio de Chicho Terremoto?

9.      ¿Qué canción de Tom Jones cantaba en play-back Carlton en “El Príncipe de Bel-Air”?

10.   ¿Qué instrumento tocaba Steve Urkel?

11.   ¿Cuál era el apellido de los gemelos que ponían en práctica la “catapulta infernal” en “Oliver y Benji”?

12.   ¿Qué enfermedad causaban las cartas de olor? (Dos opciones).

13.   ¿Dónde vivía la madre de Blossom?

14.   ¿Quién fue antes novia de Dylan en “Sensación de Vivir”? ¿Brenda o Kelly?

15.   Títulos de las dos películas protagonizadas por Hombres G.

16.   ¿Qué animal anhela Lisa Simpson tener de mascota y, de hecho, una vez consigue tener para ruina de Homer?

17.   Termina esta frase: “Seguro dental,…”

18.   Continua este diálogo “-¡Vámonos, átomos!”.

19.   ¿Qué solista español cantaba junto con “Vainica Doble” el tema de entrada del programa de cocina “Con las manos en la masa”?

20.   Termina la canción: “Ven a nuestra aldea a…”

Soluciones. Menos de 5 aciertos: esto ni te importa ni te va a importar. Sigue escuchando a Vivaldi que te va a ir mejor. Entre 5 y 15 aciertos: estás en equilibrio con la vida. Has hecho el tonto pero también has dedicado tiempo a otros aspectos más prácticos e intelectuales de la vida. Saber algunas respuestas te hace esbozar una sonrisa de autocomplacencia pero lejos de tu intención queda ser un experto. Más de 15 acierto: deberías preguntarte qué estás haciendo con tu vida.

lunes, 19 de diciembre de 2011

QUÉ HARÁS ESTA TARDE

¿Qué vas a hacer esta tarde? ¿Apoltronarte en el sofá? La vida te está esperando. Tus amigos salen a las 6 del trabajo y hace una tarde de diciembre estupenda. Esa luz que sólo se ve en diciembre.  Y si no sales a la calle, no te preocupes. Enciende el PC. O el Mac. Apaga todo lo demás.
Si no tienes Facebook, ya no eres nadie. Y, aunque prometiste cerrar el Tuenti cuando cumplieras los trenti, se te hace un nudo en la garganta sólo de pensar que puedas perder ripio en una red social.
Además, hoy no has entrado a dar de comer a la mascota de Pet Society, ni has recogido la cosecha de la granja. Tu avatar se muere de hambre mientras que seguro que tú ya has merendado. Por cierto: hazte fan de nocilla.
¿Has leído el periódico? No lo hagas. Tus amigos destacarán alguna noticia. Las que importan de verdad.  Y de paso, te enteras de qué protesta la gente. O lees el último chiste. Como ese que dice que para vida triste la del príncipe que primero se enteró que los reyes eran sus padres y luego que el hombre del saco era su cuñado.
No te hagas el desentendido diciendo que no te enteraste que habíamos quedado para cenar. Te mandé el evento. Seguro. Lo sé porque delante de mí te llegó la notificación a tu Smart Phone. Lo que pasa es que evitas felicitarme y te desconectas cuando entro yo. Luego dirás que nunca te llamo o que ya no nos vemos.
Aprende de mí, que me intereso por mis cuatrocientos y pico amigos. A veces no entiendo sus estados crípticos del tipo: “Ilusionada con que llegue mañana” (¿por qué?), “ya queda menos!!! ufff pero estoy agotada de tanto limpiar y limpiar”  (¿para qué?) o “si es que se me ponen los pelos como escarpias cuando lo veo!!!” (pero, ¿el qué?). Quizás, estén hablando del último vídeo de Bebe. Bebe la desfasada que se mete con la prensa.
O, ¿es que pensabas salir de compras? Con el frío que hace. Desnudarte en un probador. Tira de tarjeta de crédito virtual, hombre. Y después, te descargas la enésima temporada de esa serie que ves. Te apoyas el ordenata en los muslos y tienes calefacción y entretenimiento por el precio de uno. Que a veces parece que no piensas.
La vida ya no respira. Circula por las redes sociales. ¿Qué vas a hacer esta tarde?
Anoche soñé, que estas palabras eran trending topic.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Y SI…

Estamos claramente deprimidos. Hasta la Ministra de Economía de Italia se derrumba antes de anunciar nuevos recortes para sus ciudadanos. Si hasta hace unos años, quizás sólo meses, entre los amigos hablábamos de películas, discos, tele o fútbol; ahora hablamos de precariedad laboral, paro, hipotecas.
Y yo aquí, en este foro hablando de dibujos animados que nadie recuerda y cosas así. Como si no fuera yo misma víctima de esta realidad. Suerte que los que me leen comprenden.
Y estaba anoche en la cama dando vueltas, entre otras cosas a que tenía que escribir. Después de una de esas reuniones a las que me he referido. Y mezclando en mis pensamientos unas cosas y otras me pregunté qué hubiera pasado si en esas series animadas de las que hemos tratado, se hubiera abarcado una crisis económica como la actual.
Los Picapiedra trataron abiertamente el problema para tener hijos de Betty. ¿Por qué no se hubiera tratado igual el despido de Pedro? ¿Se imaginan? Al fin y al cabo, pertenece al sector más apaleado por la crisis: la construcción. El Señor Rayuela lo despediría sin consideración. O se esperaría al final del contrato para ahorrarse el despido. Ya le debería varios salarios y pagas extra. Veo a Pedro pasando la mañana delante del televisor, renunciando necesariamente a sus apuestas y Vilma sufriendo el bochorno de no poder comprar “a crédito” como está acostumbrada y de tener que mendigar algunos petrodólares a su adinerada madre para llegar a fin de mes. Los Mármol, ya habrán perdido su casa. Total, nunca supimos a qué se dedicaba Pablo. Y se comentaría en toda Piedradura que Betty volvió necesariamente a ser cigarrera.
Y en Los Supersónicos, el descenso en las ventas de cohetes habrían llevado a la "Espacio-cohetes espaciales Espacio S.A." al borde de la quiebra y el Señor Júpiter, por echarle el marrón al de siempre, le habría encargado a Súper un prototipo atractivo y económico que diera un empuje a la empresa. Pero le bajaría el sueldo y le doblaría la jornada laboral. Entonces, Súper llegaría malhumorado a casa y Ultra también lo estaría por el descenso de su nivel adquisitivo. Probablemente, el próximo verano no lo pasen en Las Venus.
En La Aldea del Arce, la actividad delictiva de Gretel se encrudecería al sufrir de verdadera necesidad y porque Otto, el policía, habría abandonado el trabajo víctima de la mala gestión del ayuntamiento liderado por Marcel. Al padre de Patty, el Señor Conejo,  también le bajarían el sueldo y ella y Bobby estarían más apáticos y volverían cabizbajos a casa al salir del colegio al que la maestra hoy no ha ido a trabajar porque está de huelga.
Por lo menos, Homer Simpson puede respirar tranquilo. Las centrales nucleares son intocables.

La Academia Catódica

Hace muy pocas semanas, me referí en estas mismas líneas de la importancia del conocimiento del idioma inglés en el seno del mundo contemporáneo. Dicen que hay dos cosas que los españoles nos pasamos la vida haciendo: adelgazando y aprendiendo idiomas y la verdad es que, reflexionando sobre lo segundo, he llegado a la conclusión de que quizás no sea tan disparatada dicha afirmación.
Si pensamos como paradigma televisivo espacios como “Sálvame”, “Águila Roja” o “Bandolera” pues, cada uno en su estilo (moralidad no equiparable jamás), no resulta que tengamos una televisión muy didáctica que digamos. Pero si hacemos un buen uso…
Bueno, ahora la TDT nos permite ver los formatos extranjeros en su lengua original pero tiempo atrás, captar palabras en otro idioma no se conseguía con un simple “golpe de mando”. Hasta que llegó la televisión por cable (léase “TeleCaravaca”. Entiéndase: el vídeo comunitario).
Bien temprano los sábados por la mañana ya estaba mi hermano aprendiendo inglés. Yo, ya perezosa a esa edad, me levantaba algo más tarde que él y me enganchaba a “Jem and the holograms”, si era posible didácticamente asimilar alguna palabra, a mí me sirvió de bien poco. Ya entonces, mi cerebro no empezaba a funcionar hasta bien entrada la mañana.
Fue por aquel entonces cuando descubrí –al menos yo-, que los Gi-Joe eran más que unos muñecos, con sus respectivos chicles promocionales.
Pero el gran reconocimiento interior nos llegó gracias a Canal Nou. Sí, en la Península se hablaban –y se hablan- otros idiomas. Ahora, nos llevamos las manos a la cabeza por bien poco pero más de veinte años atrás, un señor ideó el programa más estrafalario que he visto en mi vida: “El Show de Joan Monleón”. La canción de las monleonetes, todavía resuena en las sienes de quien alguna vez viera este magazine de la media tarde (por cierto, se puede entretener sin perder ni perderse el respeto). Me refiero al “A guanyar diners”. Ahora nos parece tan kitsch, por cierto.
Si me lo preguntan, ha hecho más por la difusión y conocimiento del valenciá “La bola del Drac” (sí, ya sé que os sabéis la canción) que una bolsa de políticos defendiendo el Estatut. Extrapolable esta comparación al catalán con “Crackovia” o “Alguna pregunta més”.
No tendría yo mucho más de doce o trece años cuando escuche a dos vecinas mías de las de toda la vida comentando los bous que los pondrían el dimecres a la vesprada. Ahí es ná o, en otras palabras:What if you want rice, Catherine!”